Totalmente de acuerdo, pero es necesario que tu excelente comentario llegue al máximo de empresas, porque, desgraciadamente, la implantación de servicios de » atención al cliente» se ha convertido en una tomadura de pelo que te obliga a estar tiempo muerto ante teléfonos atendidos, desde países remotos en algunas ocasiones, y aburriéndote con músicas o consejos absurdos para quien lo que desea es que le atiendan con la mayor celeridad posible. Antes podías hablar con el que «atendía al cliente»; ahora, incluso con quien hablas es con un contestador automático o un robot al que debes apelar mediante pulsar el 1 para A, el 2 para B y así sucesivamente, dando la casualidad que casi nunca quieres hablar con A, B o etc, sino con un Departamento o persona que no figura entre los que te invita el teléfono que pulses.